Niños de otoño

Al silencio de la tarde caen las hojas, la lluvia baña lentamente las deudas de otro cielo y todo pareciera que va peor, mas aun cuando las balas se cruzan entre campos de rabia y frustración, cuando la falta de sillas que esperan la llegada de nuevos encuentros se vuelve una ansiedad olvidada, la vida se transforma en un mundo de adultos.

Prefiero esconderme, es que ya no soy igual, según algunos estoy peor, pero que importa si te creen feliz, solo basta que tú te sientas radiante, bajo la conciencia de una mirada escondida bajo estrellas que se colocan en el camino del recuerdo, como contraseña a primaveras clandestinas.

No sé si alguien quiere escuchar cuando levanto la voz para decir que el tiempo solo es eso…. Tiempo… Como aquel café que se enfrió mientras pasaba el manto del olvido, queriendo aferrarse a un mundo tan difícil como irreal y si dicen que es absurdo, tendré que aceptar que cada vez son menos los niños de nuestro interior.

PrInCipItO
"Desde mi Principado para el mundo"

(070531)

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